Aplanar el pan de molde con ayuda de un rodillo y cortarlo en forma de cucharitas con ayuda de un molde cortapastas especial o con una cartulina en forma de cuchara. Disponerlos sobre una cuchara honda para darles forma. Disponer las cucharas de pan obtenidas en los huecos de un molde para magdalenas y hornearlas en el horno precalentado a 180° C durante 10-12’.
Partir los tomates, despepitarlos y rallarlos. Escurrir la pulpa en un colador de malla fina un mínimo de 3 h en la nevera para que suelten el agua de vegetación.
Picar finamente las virutas de jamón para conseguir la textura de un tartar.
Repartir las hojas de rúcula en las cucharitas y disponer una cdta. de tomate escurrido.
Aliñar con aceite de oliva virgen extra y unas escamas de sal. Terminar con el tartar de jamón ibérico y servir.
12 hojitas de rúcula
100 g de virutas de jamón ibérico
2 tomates
Unas escamas de sal
Aceite de oliva virgen extra